A Fernanda Vives se le nota la indignación en el tono de su voz. Intenta simularlo pero su carácter pasional la desborda y casi sin darse cuenta dispara: "lo de Jelinek es un chiste, ojalá todo el mundo pudiera irse a pasear cuando está agotado, no me parece bien que haya dejado así a su sueño y a su soñador, es una falta de respeto". No importa qué tanto se le recuerde que Karina viajó por "problemas personales", ella no parece creerle.
"Sé que el desmayo fue real porque lo ví, pero yo también bailé con fiebre y enferma. Además, tengo entendido que ella no está con el padre como dice, sino en Miami", asegura misteriosa. "No da que se vaya corriendo así, ni por salud ni por nada. Yo, por mi sueño, tengo tres chicos durmiendo en una cama de una plaza, antes de irme a pasear prefiero bailar hasta desmayarme otra vez pero no dejo ésto por nada del mundo". Según Vives, seguramente esta decisión incidirá en el futuro de Karina en el certamen.
"La gente no es tonta, ya vio cómo se lavó las manos, ahora ella va a tener que atenerse a las consecuencias si queda nominada", advirtió.
"Es obvio que muchas famosas ya olvidaron del sueño y la gente con necesidades, lo único que les importa es tomar ventaja personal de las situaciones, pero estoy tranquila porque la gente lo va a ver y al final sólo quedarán los que se toman su misión en serio", concluyó.
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